Capítulo 7

Deporte

Era el momento de reflexión. En esta casa, todos los días después de comer, se reúnen en el salón para charlar.

-¿Sabéis qué? He soñado algo súper raro. Knuckles y Rouge estaban en un sofá con un Knuckles blanco enano al lado diciendo que había sacado un 8 en historia.

-¿Cómo? – Preguntaron Knuckles y Rouge a la vez.

-Entonces, Lina llegaba vestida de Pato y decía que los invitados estaban en la puerta. Entonces entraron Silver y Blaze con un Gato blanco feísimo al lado.

-Perdona, pero un hijo mío sería guapísimo. – Replicó Blaze.

-Pero yo no controlo mis sueños. Sigo: También entraban Tails y Cosmo con un carrito de bebé, y yo y Amy detrás con un erizo morado. Ella me decía que le diera la galleta al niño, pero yo no quería porque era mía. Así que me empezó a amenazar con el martillo y tuve que dársela. Entonces me desperté con hambre.

-¡Las dos cosas que más me gustan! ¡Tú y mi martillo! – Dijo Amy entusiasmada.

-¡En serio iba vestida de pato? Bueno, ahora que has terminado, ¿jugamos al fútbol? No juego desde que estaba en París. – Dijo Lina.

-¡¡NOO!! – Chilló Sonic.

-¿Por qué? A mi sí me apetece. – Dijo Cosmo.

-¡Es muy bruta! ¡Es capaz de romperte el brazo con tal de quitarte la pelota!¡Y lo sé por experiencia! –Explicó Sonic.

-¿Te da miedo tu hermana? ¡Eso es de cobardes! –Dijo Silver.

-¡Eso no es cierto! ¡Jugaremos! Lina y yo seremos los capitanes. Salgamos al jardín.

-Las chicas vamos a ponernos el chándal. Ahora vamos.

Cuando salieron…

-¡Me pido elegir primera! – Dijo Lina.

-Está bien. ¿A quién eliges?- Preguntó Sonic.

-Mmmmm… A Silver. – Dijo Lina.

-Yo a…

En ese momento Amy se abalanzó sobre Sonic.

-¡Yo voy con él! – Chilló Amy.

-Eh… Amy, tiene que elegir él. – Dijo Rouge.

-No me digas... ¿A quién eliges, Sonic? – Preguntó Amy mientras sacaba el martillo, preparada para golpear a Sonic.

-A… a Amy, cómo no… - Dijo Sonic asustado.

-¡Vale! ¡Yo a Cosmo! – Dijo Lina.

-Yo a Tails y a Rouge. Y elijo dos porque Amy se ha incrustado en mi equipo.

-Pues yo a Knuckles. 

-Pues yo me quedo con Cream. Vainilla, ¿tú juegas? – Preguntó Sonic.

-No, Lina me ha dado la cámara. Voy a hacer fotos.

-Pues ya estamos todos. ¡Empecemos! – Dijo Lina.

-Espera, ¿quién va a ser tu portero? – Preguntó Sonic.

-Pues… ¿quieres serlo, Cosmo? – Preguntó Lina.

-Vale. – Dijo Cosmo.

-Cream, ¿quieres ser tú nuestra portera? – Preguntó Sonic.

-¡Síí!

-¡¡Empecemos!! – Gritó Lina.

-Espera otra vez. Las reglas.

-Vale, no vale volar. – Dijo Lina mirando a Tails, Rouge y Cream.

-Ni tapar la portería con enredaderas. – Dijo Amy mirando a Cosmo.

-Ni usar súper rapidez. – Dijo Cosmo mirando a Sonic.

-Ni elevar la pelota para meter gol. – Dijo Sonic mirando a Silver.

-Ni usar el martillo. – Dijo Lina.

-Ni usar el fuego. – Dijo Cream mirando a Blaze.

 -Ni poner cara de pena. – Dijo Silver mirando a Cream.

-Ni empujar. – Dijo Rouge mirando a Knuckles.

-¿Ya está todo? – Preguntó Lina.

-¡¡Ni leer la mente!! – Dijo todo el equipo de Sonic a la vez.

-Vale, vale. Empecemos.

El partido empezó tranquilito, pero Blaze perdió la paciencia muy pronto. No paraba de correr detrás de Rouge como una loca, decidida a quitarle el balón.

-¡¡Espera Rouge!!- Gritaba.

Pero Rouge seguía corriendo tan tranquila.

El partido siguió así dos minutos más, porque Silver consiguió robarle el balón. Se dirigió a la portería, y tiró a puerta, pero falló, y Cream devolvió el balón todo lo fuerte que pudo.

Pero Silver recuperó el balón, y marcó haciendo la clásica chilena.

-¡¡Gol!! – Gritó Lina.

-Ya remontaremos, ya. – Dijo Sonic.

Nada más seguir, Sonic se dirigió hacia Knuckles, quien llevaba la pelota en ese momento, y se la robó.

-¡Voy a marcar con la cabeza y todo! – Gritó.

Acertó.

-¡Eres genial, Sonic! – Gritó Amy.

-Lo sé, lo sé…

Siguieron jugando, pero esta vez con Lina enfadada, algo mucho peor. Lina le quitó el balón a Tails, y se fue corriendo hacia la portería, dispuesta a marcar, pero Amy le quitó el balón.

Llegó  Knuckle y se lo quitó a Amy, y a su vez se lo pasó a Lina de nuevo.

 

-¡Ahí va, Lina!

Lina la cogió, y siguió corriendo hacia la portería, pero vio que Sonic y Rouge se acercaban por detrás y se paró en seco, haciendo que ellos se pasaran de largo. Miró hacia ellos sonriendo.

Siguió corriendo hacia la portería, y para desgracia de Sonic y su equipo, marcó gol.

-¡Olé! ¡Dos – uno! – Dijo Lina mirando a Sonic.

-Me parece que debería dejar de ser portera, ¿no? – Preguntó Cream.

-Vale. Amy, ¿te pones en su lugar? – Preguntó Sonic.

-Vale.

El partido siguió un rato más. Casi en el último minuto, Tails consiguió quitarle la pelota a Lina, se dirigió a la portería… Pero no había caído en la cuenta de que SU NOVIA era la portera… Pero pensó que con tal de no hacerle daño a ella bastaría. Entonces tiró:

Calculó y marcó cinco segundos antes de acabar.

-¡¡Bien!! No te habrás dejado ¿no? – Preguntó Tails.

-¿No has visto que me he tirado hacia la pelota? – Contestó Cosmo.

-Pues hemos quedado en tablas.

En ese momento, Lina se desmayó. Todos miraron hacia arriba. Había oscurecido, y había luna llena. La llevaron al salón y la tumbaron en el sofá.

-¿Qué le ha pasado? – Preguntó Rouge muy preocupada.

-¿No os acordáis? Siempre tendrá predicciones los días de luna llena. – Recordó Knuckles.

-Ya, ¿pero no era a las doce de la noche? – Dijo Amy.

-Igual Lina es como un móvil. A lo mejor necesita cargar antes. – Dijo Tails.

Al día siguiente, alguien despertó a las chicas aporreando la puerta.

-¿Quién es…? – Preguntó Cosmo medio dormida.

-¡Mi visión! ¡Mi visión! –Gritó Lina súper emocionada mientras entraba en la habitación.

-¡Es verdad! ¿Qué es? –Preguntó Cream.

-¡Estaba abrazada a un chico!

-¡¡Vas a tener novio!!! ¡Qué emoción! – Dijo Blaze.

En ese momento, Sonic apareció por la puerta con su zumo en la mano.

-¿A qué viene tanto ruido? – Preguntó. Acto seguido, bebió de su vaso.

-¡Lina va a tener novio!¡Podremos tener citas dobles! – Dijo Amy emocionada.

-¡¿Cómo?! - Dijo, pero no antes de escupir todo el zumo por la alfombra.

-Eso vas a limpiarlo tú. Mmmmmmm… me pregunto quién será el de mi visión - Dijo Lina dubitativa.

CONTINUARÁ…